viernes, 20 de noviembre de 2015

Los descosidos que nunca te romperé.

- Si pudieras matarme, ¿Cómo lo harías?


Me he tragado la llave del piso de Lavapiés y la he vomitado en nuestro balcón lleno de flores, muertas. He reservado los billetes a Sudamérica y los he hecho un avión. Hemos follado en el Más Allá y ha sido el único polvo que había en el lavabo. Hemos vivido La Movida y me has cantado que da igual dónde lleven tus calles si no es a mí. He calmado tus pesadillas y tú me has calmado a mí. Te he deshecho los ojos y he criado todos mis cuervos. Me has dejado que te fotografíe y me has pedido sonreír más fuerte. Hemos vuelto a -nuestra- casa borrachos y mañana compartimos el domingo. Me has enseñado la cerveza y ahora el ron son sólo arcadas. Daughter nos ha dado la vuelta al mundo y mi canto han sido tus dientes. Me has pedido que deje de fumar y hemos visto arder gasolineras. Allende ha gritado y Chile se ha tapado los oídos. Hemos roto espejos y nos hemos visto más enteros que nunca. Hemos dejado de ser alérgicos a las llamadas y lo hemos hecho a gritos. En Chamartín ha habido un desahucio y ya van ochocientos cuarenta y tres. Hemos quemado estaciones de autobuses y nos dado cuenta de que la gasolina somos nosotros. No nos hemos chillado y luego nos hemos pedido perdón.






- Haciendo todo lo que nunca.