Y entonces sucede.
Yo fuerzo la mecánica del corazón. Retocedo las agujas. Como si así consiguiese retroceder en el tiempo. Recuperándote de ti (
y creo que soy hasta valiente diciendo que te recupero como si algún día te hubiese tenido) y todo el tiempo que perdimos. Lo malgastamos en palabras vacías, en mentiras baratas y en
besos no dados no canjeables.
Y ahora, ¿qué?. Mi cabeza está llena de ideas que no se quieren ir. La idea de 'por si'. Cómo si fueses a volver.
Cómo si algún día hubieses estado. Pero,
¡Qué locura!. Y es que nunca es tiempo para echarte de menos, pero yo voy a contrareloj.
No supimos conjugar en primera persona del plural.
Siempre tú, nunca yo y jamás nosotros.
Mejor blog no he visto..!!!!! Cuanta razon..
ResponderEliminar